Antes de adoptar..

ANTES DE ADOPTAR CONSIDERA:

Cuando adoptas un animal adoptas una responsabilidad que durará toda la vida de éste y que lleva aparejados inconvenientes y gastos.
 

-Un nuevo miembro en la familia

El animal que adoptes será un miembro más de tu familia. Si alguien de tu familia no le gustan los animales, tiene problemas de alergias o no está de acuerdo con tener un animal en casa, es preferible no adoptar. Para adoptar debe estar de acuerdo y conforme toda la familia, de lo contrario sólo servirá para crear tensiones y disgustos que harán infelices a todos, incluido el animal que se adopta.

- ¿Cachorro, adulto, viejito… qué elegir?

 Un perro o gato, dependiendo de diversos factores (genéticos, de alimentación, etc), viven una media de 15 años y a veces incluso más. Hay que pensar por tanto si la edad del animal que adoptamos es la idónea para nosotros, según la expectativa de vida del animal en cuestión, considerando con honestidad si podemos adquirir ese compromiso. Si es así, ¡adelante! Si no, quizá debas decidirte por un animal más viejito; hay muchos que necesitan familia y te querrán y te acompañarán tanto o más que uno joven. El tópico de que para acostumbrarse a ti debe ser un cachorro es absolutamente falso.

-¿Cuáles son sus necesidades básicas?

 Un animal no es un electrodoméstico que se apaga o enciende a gusto del dueño; es un ser vivo con las mismas necesidades físicas y psíquicas que podamos tener nosotros, esto es: alimento, refugio, cariño, compañía, ejercicio, educación, atención veterinaria… Si por falta de tiempo o de poder adquisitivo no puedes ofrecer a tu animal estas condiciones, es mejor que esperes a tener ese tiempo o ese dinero que te permitan mantenerle como es debido, por su felicidad y por la tuya propia.
Por este mismo motivo, recapacita también sobre qué tamaño y clase de animal va mejor con tu tipo de vida. Si tu vida es sedentaria o activa, si tienes mucho o poco tiempo libre, si tienes espacio suficiente, si tienes niños pequeños en la familia…
Y recuerda que “un animal feliz hace feliz a su dueño”. En cambio, un animal desatendido, falto de ejercicio o de cuidados puede ocasionar infinidad de problemas.

-¿Qué debo esperar?

Algunas veces nuestros animales tienen una historia previa de malos tratos que puede haber afectado su carácter o su comportamiento. Adoptar un animal abandonado requiere sensibilidad y paciencia y, sobre todo, un compromiso firme de proporcionar una vida mejor al animal.
Por eso, el que más pena nos da, no es siempre es la mejor opción, como tampoco es siempre lo mejor elegir un cachorro. Lo mejor es explicar a nuestros voluntarios qué buscas en tu animal de compañía y dejarte asesorar por ellos, que son quienes mejor los conocen.